lunes, 21 de mayo de 2007

siembra

te juro que me estresa. que me despierto asustada, buh! que cuando se soluciona un ambiente toco el cielo con las manos, y que cada paso que dejo atrás es como si tirara
un ladrillo que llevo a la rastra, atado a la cintura.
lo de la pintura de los muebles de la cocina, me dieron ganas de ir ya y hacerlo, o de saltarte encima para darte las gracias porque lo dijiste tan una pavada y a mi se me representó cual genialidad iluminada que no te puedo explicar....
y además la piña que es que me frenes y me digas calllate y pará]---. y pararnovoyapararporqueno, porque estoy en ese momento en el que no se puede.
porque me recibo me mudo y me masterizo y todo junto, aunque tal vez se venga una catástrofe de aquellas.
porque es invierno y estoy apuntandole a la pileta.

lunes, 14 de mayo de 2007

la felicidad queda en Grecia.

la felicidad tiene un ventanal grande a un costado del edificio y, en el escritorio pintado de naranjita, pachorrea un sábado a las tres en un sillón mullido. pero todavia no.
antes arranca jirones de empapelado de espaldas sobre el piso de mosaico- frio- y mientras, lo lustra con el buzo viejo. pero todavía no.
antes no duerme porque hace cuentas.
y no duerme para no olvidarse del recibo n° 108.
y no duerme por las dudas de que alguien se arrepienta.
y se marea.porque no termina de decidir si las lamparas que quedaron o alguna baratija que pueda conseguir.y porque sabe que todavía no.
y mucho sesentas.y mucho consejo cruzado.
y todavía no, pero.

miércoles, 9 de mayo de 2007

y ya entonces pensaba...

hay un punto donde este sistema se vuelve insoportable. y no por injusto o doloroso o mierda, sino apenas, por aburrido y rutina.
el proceso mientras lo aprendés es un desafío, el convertirse en un experto te lleva tiempo... después la automatización y el acelere, una pequeña sensación de confianza en los movimientos, de saber what´s next.
y un día, te harta. ya no tiene gracia adivinar adónde se va abrir la puerta del subte para subir primero, ni adelantarte a todos los requisitos de administración para llevar hasta el último papel en un solo viaje. la experiencia empieza a pesar. y te empezas a ir y se te cruza el volantazo pero también la volcada y el auto destruído. y la tranquilidad chota de despertarte acá y la sensación trillada de lo malo conocido.