viernes, 28 de marzo de 2008

pride

escribo y tomo mate, un mate exquisito, preparado excelentemente y con calma, cebado tres veces antes de tomar. de esos que por suerte acá hoy nadie quiere entonces está siempre a medio llenar, con espuma consistente, caliente y amargo, pero no feo, amargo. sin café ni cascarita de nada, ni azúcar en el agua ni al principio, como esos mates que enseguida tienen gusto a chicle masticado. porque así como no sé bailar o contar chistes, sí sé hacer mate.

No hay comentarios: