lunes, 24 de septiembre de 2007

con cable

durante dos años y un mes no tuve cable. no lo sufría particularmente, no lamenté tener que propocionarme mis propias películas en soportes tangibles ni mejoré mi lectura antes de dormir, mi vida sin cable no fue redicalmente distinta a la de antes y sobre después, después veremos.
Las razones: economía y fobia. baja tolerancia a personas con borcegos que cual tromba se asoman a la ventana para comunicarse a los gritos con su par que está en la terraza y marcar la pared blanca con los guantes con grip que no paran de acumular mugre. además de eso, coodinar un horario y esperar.
sin embargo el sábado casi sin mucha consciencia lo superé, y hasta negocié que se fueran y volvieran en un rato por favor y con cara de buena, y de que de verdad necesitaba que el cablecito negro emane calidad de imagen.
cuando el menos simpático de los instaladores, sin pedir permiso le sacó la antenita a la tele del cuarto y me la entregó en la mano diciendo "esta no la vas a necesitar más" me debo haber reido de pensar en un oculista que después de operar a su paciente le saca una venda y le tira los lentes a la basura o algo así.
Se fueron, limpié obviamente y esa tarde nomás agarré una maratón de los simpson semi eterna.

jueves, 20 de septiembre de 2007

de primavera

y como siempre, me mejoró el humor. aun sabiendo que el equinoccio es recién el 23, que el verdadero día de la primavera es el cumpleaños de mi abuelo, ya se siente en el aire.

=)

miércoles, 19 de septiembre de 2007

la vida color tusor

cansada de reclamar por teléfono, decido tirarme en lo que en mi vida parece estar destinado a ser el sillón: un puf doble amarillo, incómodo pero reconfortante. Me abriga del horno jodido, del cuerito que hay que cambiar y me calma las ansias de los actos de vandalismo que planeo contra www.dellacasa07.blogspot.com. me autoriza con lástima pero casi sin reproches a cantar el tema de Cristian Castro que pasan en Vale, porque yo no elegí la radio, pero tampoco me tome el trabajo de cambiarla. y me duerme, el turro. me chupa la energía para que no chille más, hace equilibrio conmigo hamacándome hamacahipnotizándome hasta que llegues.

lunes, 17 de septiembre de 2007

dolor de nariz

siempre pienso que es una sinusitis que nunca tuve, pero sé que hace doler la nariz. sin embargo, tiene que ver con alguna hora de la tarde, los cambios de clima y, probablemente, los sahumerios.
y también con un recuerdo, frio en la plaza, llegando apurada, sin saber muy bien a qué.

viernes, 14 de septiembre de 2007

estresado (o yo y mis reacciones no sólo alérgicas)

una vez pasé una semana con 39 de fiebre y 15 llagas en la boca. nunca quiero olvidar eso.

el estrés se me hace carne. tengo sueño y malestar. la cara demacrada, brotada, rosa, la boca dolorida, el estómago indefinidamente mal, dos o tres moretones, un pedazo de piel perdida culpa de un destonillador que se zafó y un nudillo quemado con el horno. estoy horrible.

voy a tirar todos los muebles a la mierda y convertir mi casa en un box de spa. antes de que empeore.

viernes, 7 de septiembre de 2007

no sos vos, soy yo

una vez, menos de un post por día era escribir poco.-

interna

mi minuto de gloria -personal, absurdo, incomprensible- de los días chotos que corren acá adentro y me chupan la sagre, es en el que suena mi teléfono del fondo y alguien (sintesis de mucha gente) me pide que por favor le traduzca lo que le acaba de decir el viejo villero de mi jefe.

jueves, 6 de septiembre de 2007

grito primario

Un fin de semana de esos que te pasan todas, el día después del mayor miedo de mi vida, al menos así de acordarme, al menos así de querer llorar(de cagazo) en el medio de la vereda, de entrar a un bar pidiendo "que no te mueras, que no te pase nada, que por favor me perdones", el día después de cuando un peón de mudanza me miró burlón por casi desmayarme por un bajón de presión...
El día después, fuimos al hospital por un reliveran inyectable de trasnoche, en lo que no podía dejar de pensar como un experimento, una de esas cosas que uno hace para saber qué se siente, un ir al lugar del crimen para contar una historia policial.
Sin embargo, una de las cosas que más me quedaron es esa que te conté de golpe, que me hizo incorporar en la silla al costado de la cama.
los pisos son todos iguales?
los tacos son todos iguales?
los médicos caminan todos igual de firme y apurado?
o el sueño que me juega una mala pasada, el famoso olor a sopa con espadol y esa cosa de estar en un lugar que podría haber sido familiar se mezclan a esa hora los domingolunes?
te omito los detalles, (que traía un saco verde, cardigan en verano, que siempre había una frazada a cuadros dando vueltas y que el control remoto tenia tela adhesiva pegada y escrita) los viernes a la tarde iba a visitar a mi mamá al trabajo. la pieza del médico de guardia donde mirabamos la tele estaba al fondo del pasillo. y si se iba a atender, yo sabía cuando volvía, por los tacos.